Con la llegada del verano y el calor, este mes de julio no nos ha dado opción a centrarnos en una única fruta, dado que son muchas las protagonistas en estos meses. En este post te acercamos las principales frutas del verano, lo que nos pueden aportar y las características de su etiquetado.

La sandía y el melón: dos frutas que por su cantidad de agua, textura crujiente y exclusiva dulzura resultan más que refrescantes, un dato importante para mantener una buena hidratación este verano.

Tanto la sandía como el melón son frutas bajas en nutrientes necesarios como el potasio y el magnesio, y es el melón el que contiene algo más de fructosa y ello se traduce en que nos aporta un mayor aporte calórico.

Su etiquetado es resistente, de materiales flexibles para que se adapten a la curvatura de la fruta y aptas para superficies irregulares. Además, las tintas usadas son especiales de baja migración, puesto que están en contacto directo con el alimento.

Melocotones y nectarinas: son frutas ricas en potasio y vitamina C, además de contener más caro, es decir, pro-vitamina A, necesaria para mantener la piel en perfectas condiciones.

El etiquetado estas frutas de hueso comparte características similares al de la sandía y el melón. Los melocotones y nectarinas se caracterizan por tener pieles gruesas, expuestas directamente en el punto de venta y ser altamente manipuladas durante la distribución y el momento de compra.

Cada vez son más las marcas las que eligen dotar de valor añadido a sus etiquetas con relieves, stamping, lectura para invidentes… Éstas son algunas de las técnicas con las que podemos hacer diferente una etiqueta, y por tanto, un producto