INFORME DEL INSTITUT CERDÀ PARA EL MINISTERIO DE AGRICULTURA SOBRE LA LEGIBILIDAD DE LA ETIQUETA.
La fecha de caducidad, los ingredientes o las condiciones de conservación son los datos que mas busca el consumidor cada vez que selecciona un producto y lee su etiqueta. Esta se trata de una información que ha publicado el Institut Cerdà para el Ministerio de Agricultura, tras haber realizado un informe que concluye que siete de cada diez españoles lee siempre el etiquetado de los alimentos antes de comprarlos.
Del informe se extrae y según recoge el portal 20minutos.com, que los españoles puntuamos con una nota de 5,7 sobre 10 la facilidad de entendimiento del etiquetado de los productos y añade la persistencia de ‘trampas’ o ‘engaños’.
Recientemente, desde Etygraf ya publicamos en nuestra sección de noticias aspectos sobre la nueva normativa del etiquetado de alimentos que entró en vigor el pasado 1 de abril. Ahora, ahondamos un poco más en detalle en los requisitos que debe cumplir el etiquetado de productos para evitar estas ‘trampas’:
– En España, todas las etiquetas deben estar en castellano y el tamaño de la letra no debe ser menor de 1,2 mm (o 0,9 mm si el envase es menor de 80cm2).
– El orden de aparición de los ingredientes debe aparecer de mayor a menor peso. En general, la etiqueta debe mostrar la cantidad de ingredientes o de su categoría, la cantidad neta del alimento, la fecha de caducidad o consumo preferentes, las condiciones especiales de conservación y de utilización, información nutricional y su grado de alcohol (si la bebida tiene un 1,2% de alcohol en volumen).
– Los ingredientes de productos que puedan causar algún tipo de intolerancia deberán de identificarse.
– La etiqueta debe incluir la procedencia y origen del producto.
– Para el etiquetado de productos cárnicos, estos deben llevar la marca sanitaria de los mataderos o establecimientos de manipulación de caza.
Por su parte, las frutas y las hortalizas están exentas de esta normativa y a ellas se les suma las aguas carbónicas, los vinagres de fermentación, los productos lácteos sin componentes más allá de los necesarios para su fabricación. También entrarían en este grupo los alimentos que solo están compuestos por un ingrediente.